jueves, 13 de julio de 2017

El negociado de Plaza Houssay

Cosas que pasan en la La Ciudad de la Furia. El Gobierno de la Ciudad le otorgó una obra de 19.500 metros cuadrados, donde habrá un Centro Comercial, un Paseo de Compras y Gastronómico, a cambio de cederle la explotación comercial del mismo con la obligación de pagar un canon mensual inicial de $ 400 mil, a una empresa que cuenta con un capital en todo concepto de $ 100.000 y que fue creada en agosto de 2016.


Se trata de la Licitación convocada por el Gobierno de la Ciudad, a través del Ministerio de Modernización, para que una empresa se ocupe del diseño, construcción, mantenimiento, administración y explotación del Centro Cultural, Gastronómico y Estacionamiento "Plaza Dr. Bernardo A. Houssay". La empresa "Lamp Investments S. A." resultó ser la ganadora de la licitación y tendrá derecho a la explotación comercial por 20 años con derecho a 10 más con un canon mensual inicial de $ 400.000.

La Plaza Houssay ya había sido remodelada durante el año 2015 de acuerdo a un convenio suscripto entre la Universidad de Buenos Aires y el Gobierno de la Ciudad por lo que la misma estuvo cerrada durante 5 meses. A menos de un año de ser reabierta y reinaugurada como "Campus BA" de Plaza Houssay, la Legislatura de la Ciudad aprobó un proyecto de Ley denominado "Campus Urbano".

El Proyecto de Ley fue presentado por el Poder Ejecutivo porteño y fue aprobado en primera lectura en diciembre de 2015 y en mayo de 2016 se convirtió en Ley al obtener 54 votos positivos y tan solo 4 negativos (La Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se compone de 60 legisladores). Los tres bloques parlamentarios mayoritarios le dieron su apoyo total en ambas oportunidades.

Pese a que Lamp Investments S. A. debe iniciar las obras para la construcción del Centro Cultural, Gastronómico y Playa de Estacionamiento “Plaza Dr. Bernardo A. Houssay”, la Resolución  N.° 478/MMIYTGC/17 (publicada en el Boletín Oficial el pasado viernes 7 de julio próximo pasadono abunda en detalles respecto de las obras que se realizarán ni de las características del polo gastronómico, aunque sí se explaya respecto a que la playa de estacionamiento se construirá en dos pisos “del predio bajo rasante del predio ubicado entre la Avenida Córdoba y las calles Junín, Paraguay y Presidente José E. Uriburu”.

La Resolución mencionada corresponde al Ministerio de Modernización que fue el organismo que llevó a cabo el proceso licitatorio pese a que en el Gobierno de la Ciudad funciona el Ministerio de Desarrollo Urbano que tiene como misión el diseño de las políticas e instrumentación de los programas y proyectos destinados al planeamiento urbano y a la ejecución y fiscalización de obras públicas de la Ciudad. Es claro, que debería haber sido este último ministerio el encargado del proceso licitatorio y no el de Modernización, a lo sumo, estamos frente a un interrogante que tiñe de sospecha a la licitación convocada. Más cuando el encargado de defender el proyecto en la Legislatura porteña fue Álvaro García Resta, subsecretario de Proyectos del Ministerio de Desarrollo Urbano y Transporte del Gobierno porteño.

Por otra parte, se le adjudica una obra de gran magnitud y de una potencial explotación comercial millonaria a una empresa que tan solo cuenta con $ 100.000 de capital de respaldo, que fue creada el año pasado y cuyo objeto comercial es "la compraventa de inmuebles, su permuta, locación, leasing, subdivisión o loteo; la construcción de edificios o su refacción y reciclado; la administración de inmuebles urbanos o rurales, y operaciones comprendidas en la ley de Propiedad Horizontal". Cabe resaltar que Lamp Investments S. A. fue creada dos meses después de sancionada la Ley que aprueba el nuevo diseño de Plaza Houssay. Y cuando parece que ya no hay más motivos para la sospecha, surge que en Panamá existe una empresa homónima de Lamp Investments S. A. Nada es claro alrededor de ésta adjudicación.

Cambio de Ministerio para redactar pliegos y adjudicar el negocio Plaza Houssay, adjudicación a una empresa que no tiene ni un año de funcionamiento en el país, cuyo objeto comercial no resulta ser compatible y que no cuenta con respaldo económico para llevar adelante el proyecto adjudicado.

Pasan cosas en la Ciudad de Buenos Aires y esas cosas pasan cuando en la Legislatura de la Ciudad se vota otorgándole al Jefe de Gobierno un cheque en blanco para que un inversor privado haga negocios con bienes de dominio público de la Ciudad de Buenos Aires.

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